El flocado se utiliza para producir una superficie aterciopelada. Se utilizan fibras de colores de 0,3 – 0,5 mm de longitud, de poliamida o viscosa, por ejemplo. En los procesos de flocado mecánico, que utilizan vibración o aire comprimido, los flocados forman una capa no uniforme y sin orientación en la superficie. Por esta razón, se emplean casi exclusivamente procesos electrostáticos, a veces complementados con técnicas mecánicas . Para asegurar la alineación en el campo electrostático, las flocas se producen en una forma conductora de flujo libre. Antes del flocado, la superficie del sustrato se recubre con un adhesivo en el que los flocados quedan anclados de forma permanente. A veces, es necesario un pretratamiento de la superficie. Se dispone de equipos para el flocado de películas, láminas, molduras y artículos huecos empleados en la industria del automóvil, sector del embalaje, juguetes, bisutería, etc.