Infección de garganta

• Infusión de cúrcuma y té verde Esto te permitirá desinflamar al mismo tiempo que hace que la infección sea menos fuerte. Para consumirlo solo, debes preparar el té verde como es costumbre, pero cuando se encuentre en el punto de ebullición agrega una taza mediana de cúrcuma dura.
• Ajo Es uno de los antibióticos naturales más poderosos, sin embargo, para aprovechar sus beneficios solo debes moler un ajo y diluirlo en vaso mediano con agua. Después bébelo.
• Infusión de tomillo, miel y limón El tomillo es un antiséptico con capacidad para combatir los gérmenes que dañan tu garganta, además mezclarlo con mil reduce la inflamación y el dolor resultante de una infección. Lo único que necesitas para prepararlo es hervir dos cucharadas de tomillo hierbas en un litro de agua, incluyendo el jugo de un limón y también sobre una cáscara sagrada. Deja reposar y endulza con dos cucharadas de miel de abeja.
• Por último, pero no menos efectivo, hacer gargaras con un poco de agua con sal. Además de proporcionarte un efecto calmante te ayudará a reducir la infección. Si quieres potenciar su efecto, puedes incorporar a esta solución una cucharada de vinagre de manzana o bicarbonato de sodio.
• Toma una cucharada de miel. La miel es un excelente antiséptico, se entiende, ayuda a combatir las enfermedades infecciosas destruyendo los microbios que las provocan. Asimismo, ayudar a eliminar los tos, de manera que se toman una o dos cucharadas lentamente, colocando la miel nuevamente en la parte posterior de nuestra boca, puede ser una importante defensa contra dolores descomunales. Hay que tener en cuenta, sin embargo, que los niños menores de un año no pueden tomar este alimento, ya que puede estar contaminado con la bacteria Clostridium botulinum que provoca la aparición de botulismo entre los bebés.
• Hacer gárgaras varias veces al día con agua tibia con sal permite que esta absorba el agua de las células de la membrana mucosa, que se encuentran inflamadas durante el constipado. La cantidad recomendada es la de  media cucharada de sal por cada vaso de agua; si el sabor es desagradable, podemos recurrir a la miel, otro alimento beneficioso para la garganta. Debemos tener cuidado, puesto que si hacemos gárgaras más de tres veces al día podemos terminar resecando las membranas mucosas, lo que conseguiría el efecto opuesto al esperado. Y, por supuesto, nada de tragar: con medio minuto es más que suficiente.
• Toma una sopa de pollo. Cualquier caldo caliente es beneficioso para tu garganta, pero los médicos recomiendan particularmente la sopa de pollo, así como la de vegetales o la de carne de vaca, al mismo tiempo que desaconsejan la de tomate, excesivamente ácida, o las que contienen lácteos, que aumentan la producción de mucosidad. La sopa caliente proporcionará alivio a las gargantas doloridas y una buena cantidad de sodio a nuestro organismo.
• Vinagre de manzana. El vinagre de sidra de manzana posee una gran cantidad de propiedades antibacterianas que atacan directamente la infección que causan las bacterias y ayuda a suavizar el dolor de garganta. Esto se produce debido a que la acided del vinagre interactúa con el pH, el cual disminuye y esto produce que los microbios no puedan seguir creciendo. Además, la naturaleza expectorante del vinagre diluye la mucosidad, lo que permite expulsar las flemas con mayor facilidad.
• Paletas y cubos de hielo. El frío puede ser altamente efectivo para tratar el dolor, la inflamación y la hinchazón que con frecuencia aparecen con la amigdalitis. Las paletas heladas, bebidas congeladas como ICEE y los alimentos congelados como los helados pueden ser particularmente útiles para los niños pequeños que no pueden usar otros remedios caseros con seguridad. Los niños mayores y los adultos también pueden chupar trozos de hielo.